Nápoles

Puerta del más allá

El propósito de este viaje es sentir íntimamente la conexión con el más allá.
En estos lugares la fuerza de la Tierra está presente de manera intensa, desdibuja la frontera de la realidad hasta unir presente, pasado y futuro, propiciando oráculos y milagros que forman parte de lo cotidiano.

Los egipcios creían que el Sol en su camino nocturno ingresaba en un cielo intermedio la «Duat», poblado por dioses y espíritus, era el lugar donde se preparaba para renacer cada día.
Con el tiempo ese cielo se localizó bajo tierra, entendemos así la fuerza de esta ciudad y de sus templos.

Nápoles es una ciudad a caballo entre Europa y el Norte de África; su trazado es occidental, pero el sentir de Oriente marca el ritmo de la vida y el carácter de su gente. Las capillas y oratorios guardan, cada pocos metros, las calles del casco histórico, añadiendo un halo de pasión la ciudad que nos remite a otra época.
Otra lectura de la ciudad, nos habla de civilizaciones superpuestas, hasta perderse en los tiempos, que excavaron un mundo subterráneo y construyeron otro en superficie con la piedra que extraían.

Nápoles sería el mundo visible, la punta del iceberg de ese inframundo intuido.

Una de las máximas expresiones del mundo subterráneo es el antro de la Sibilla.

Esta conexión del inframundo con el más allá, hace posible esta sensación tan especial, que permitía a la Sibilla sus vaticinios, y que aún hoy en día, el sentir religioso este presente con sus milagros, muestran que hay otras posibilidades más allá de lo razonable.

Ruta del Viaje

DÍA 1 | Visita al centro histórico de Nápoles

Visitaremos el corazón de Nápoles, para ello nos adentraremos en las vitales y coloridas calles del centro histórico, donde veremos y sentiremos alguno de sus templos más emblemáticos. Disfrutaremos además de la exposición anual de pesebres navideños, que atrae a publico de todo el mundo.

DÍA 2 | Visita al enigmático Antro de la Sibilla

Uno de los oráculos más famosos de toda la antigüedad, mencionado por Virgilio en el libro VI de la Eneida, cuando Eneas desembarca y sube al peñón «donde preside Apolo / y mora solitaria la Sibilla, / augusta en su antro inmenso, ella la intérprete / a quien el delirio vate con su espíritu/ alienta, inspira y muestra lo futuro. / Por el bosque de Trivia andando Eneas, / avanza con su gente al áureo templo» y después por Dante en la Divina Comedia.
Un pasadizo que nos lleva a otra percepción, otra parte de nuestro ser, donde se funde el culto de la Luna, el Sol y el ultramundo.

DÍA 3 | Visita Herculano

Visitaremos la más hermosa y mejor conservada ciudad romana oculta por la lava del omnipresente Vesuvio: Herculano.
Nos adentraremos en sus calles, casas, templos y casi podremos respirar el pulso de una ciudad romana de la época y disfrutaremos de su espíritu lúdico, que aún resuena en el ambiente, manteniendo el lugar ligero y alegre.

DÍA 4 | Visita a Nápoles

Para acabar nos sumergiremos en la quintaesencia de Nápoles y su sentir, visitando las reliquias de sus templos y apreciando sus milagros directamente en persona. Podremos disfrutar además de su estupenda gastronomía.