Sitúa los pies con el ancho de caderas o el ancho de tus hombros, o aún puedes abrir unos dos centímetros más, para aumentar la sensibilidad.
Sitúa los pies con el ancho de caderas o el ancho de tus hombros, o aún puedes abrir unos dos centímetros más, para aumentar la sensibilidad.