DISEÑO DE ESPACIOS
Diseño de espacios
Diseño de Laberintos energéticos.
Caminos energéticos.
Emplazamiento de Menhires (piedra de compensación).
Puntos de Dinamización.
Fuentes y puntos de agua.
En primer lugar, las sensaciones que genera el espacio deben de ser el núcleo del diseño de espacios. La estética debe potenciar esas sensaciones
Laberintos
Un laberinto debe considerar: en primer lugar la energía del lugar.
Para seguir efemérides como solsticios, equinoccios o posición de estrellas.
Sin olvidar la Orientación.
Por último y no menos importante Geometría Sagrada Sensitiva.
Caminos energéticos.
Los jardines clásicos, como los de la Alhambra, las ciudades romanas, egipcias y otras de la antigüedad, respetaban la trama energética del lugar. Como resultado se sacralizaba su espacio, generando bienestar y conciencia y calidad de vida
Menhires.
La energía del menhir es expansiva, por lo que puede abarcar una superficie de un par de kilómetros radio, en función de su tamaño, intensidad del punto, material que lo constituye.
Como consecuencia es un elemento clave en el diseño energético de espacios debido a su intensidad, capacidad de dinamización.
Punto de Dinamización
Dinamizan el espacio con sensaciones precisas e intensas, generando pensamientos y actitudes en aquellas personas que se sitúan sobre ellos.
Por lo general, es importante tenerlos en cuenta para crear zonas con climas especiales en el diseño de lugares .
Fuentes y puntos de agua.
El agua, tanto fuente, estanque o curso tiene efectos inmediatos e intensos, dando una dimensión y una profundidad difícil de alcanzar. Por eso cambia el diseño del espacio de manera decisiva.
UNA NUEVA FORMA DE HABITAR
Para empezar, lo ideal es comenzar sintiendo el lugar y viendo que calidad nos ofrece, es decir, las sensaciones que genera y, por tanto, que funciones facilita, por ejemplo:
Si el espacio me activa, la dinámica acorde sería trabajar o interactuar con los demás. Sin embargo, si me conecta con tierra puedo situar un dormitorio o un espacio de introspección, como una sala para meditar.
Por suerte, es posible cambiar o modular las sensaciones presentes en un lugar, para ello es preciso entender su estructura energética y afectarla. Son las técnicas de los Maestros de Obra, basadas en la escucha y la sensibilidad.
En conclusión, estas prácticas permiten reconfigurar un espacio de manera estable, durante cientos de años, tal como apreciamos en los templos y palacios que erigieron desde la antigüedad los Maestros de Obra.